Actores: Emma Watson, Tom Hanks, John Boyega, Karen Gillan, Bill Paxton
Género: Ficción
Duración: 110 minutos
País: EEUU
Año: XXII
Son clásicas en el cine las historias que reflejan la invasión de la privacidad y aquellas protagonizadas por un personaje que ingresa en una institución aparentemente inofensiva y descubre que en ella hay zonas oscuras. Los progresos tecnológicos actualizan estos temas constantemente y plantean preguntas éticas sobre su propio alcance. En el caso de El Círculo, vemos a una joven (Emma Watson) que logra trabajo en una superempresa, y tiene que responder a demandas de información frente a varios monitores.
Bajo la dirección de un visionario (Tom Hanks) a lo Steve Jobs, esta compañía ejemplarmente generosa en las condiciones y remuneraciones de trabajo, fabrica o distribuye dispositivos de seguridad y también de espionaje accesibles a cualquiera bajo el principio de que la transparencia es democracia y responsabilidad. De hecho, aplica este principio a sus empleados, animando a que todos compartan todo con todos, aunque los dos propietarios sí se cuiden de mantener una opacidad en aspectos fundamentales. El drama se centra en la inocencia compatible con la notable inteligencia y perspicacia del personaje de Emma Watson a medida que va comprendiendo la trascendencia del ingenio del ojo que todo lo ve. Aparte de la verosimilitud de los progresos de El Círculo en la integración en su campo de actuación, no se contienen novedades y se desarrolla un suspense sobre los pasos de la heroína y la respuesta de sus jefes tan amables (Tom Hanks) como temibles llegado el caso.
Las especulaciones sobre un futuro en el que el Estado pueda ser usurpado por una empresa ya eran más o menos conocidas, es decir, es el tipo de entretenimiento que podría despertar alguna reflexión sobre los servicios que usamos y que nos usan online.
Aunque basada en una novela, parece concebida para sus actores. Desde la candorosa Emma Watson, quien cuanto más se adentra Mae, su personaje, en esta inmersión tecnológica más se convence de que la privacidad no solo es egoísta, sino que ocultar las experiencias personales es un delito, hasta el simpático Tom Hanks, quien está tan creíble y convincente en su papel de neo Steve Jobs que hasta podría vender polvorones en el desierto y hacerse de oro.
El Círculo maximiza en forma de thriller los peligros haciendo que en pantalla resulte exagerado lo que en la realidad, simplemente, es.