LA AUTOPSIA DE JANE DOE (André Obredal, XXII)

Misteriosamente terrorífica

Comentar este artículoComentar Imprimir este artículoImprimir Enviar este artículoEnviar

La autopsia de Jane Doe

Director: André Obredal

Actores: Emile Hirsch, Brian Cox, Olwen Catherine Kelly, Ophelia Lovibond, Michael McElha

Género: Suspense

Duración: 99 Minutos

País: Gran Bretaña

Año: XXII

Algunas películas engañan, hacen que el espectador crea estar ante una trama de puro suspense para luego cambiar radicalmente el argumento y volverse irreconocible. Ciertamente esta práctica del despiste no es muy común, pero puede encontrarse. Eso sí, lo realmente difícil es lograr una transición aceptable entre géneros. Esta técnica precisamente es la protagonista en la nueva cinta britano-estadounidense La autopsia de Jane Doe. El largometraje nada entre las aguas de la intriga y el más puro terror al estilo demoniaco. Es tarea del público destapar el lado dominante, aunque la línea que separa ambos es extremadamente delgada.

Un frio dia es hallado el cuerpo sin vida de una joven de entre veinticinco y treinta años sin signos superficiales de haber sido herida, violada o perjudicada de algún modo. La tarea de averiguar que o quien pudo entonces desencadenar la muerte de la chica les corresponde al dueño de la funeraria del pueblo y a su hijo. Disponen de una noche para unir las piezas de un puzle que a priori no tiene ni pies ni cabeza. La única opción que aportará pistas esclarecedoras es la cuidada autopsia que le practicarán y a medida que esta se va desarrollando empiezan a desencadenarse sucesos muy extraños o incluso paranormales que no conseguirán sino incrementar las dudas respecto al caso.

El hilo de la producción está sorprendentemente bien llevado, entrelaza magistralmente los ingredientes de una potencialmente exitosa novela negra al más puro estilo Camila Lackberg con su Princesa de hielo y una escalofriante sucesión de tomas terroríficas que sugieren la entrada en escena del propio demonio. Tildarla de experimento no sería ninguna tontería, pero en este caso la nota de la mezcla es de sobresaliente. A medida que avanzan los minutos de metraje el color carmesí oscuro del inicio se va volviendo cada vez más oscuro, hasta recordar el negro profundo llegado el nudo- desenlace.

Miles de sugerencias entre veladas y unos ricos efectos especiales que merecen reconocimiento hacen las delicias de los exigentes. Aquellos que llegan al cine con expectativas elevadas y que no se conforman con los sustos predecibles obtendrán en este visionado lo que buscan, sorprenderse y pasar un rato en compañía del mejor cine. Algo que parece volver a  ser una realidad tras un pronunciado periodo de sequía en la industria. Quizá el tema de los argumentos mixtos como este vuelva a ponerse de moda si el filme consigue arrasar tanto como en un principio cabría esperar dada su alta calidad. Otro de los factores principales que le hacen ganar fuerza y efectismo es la interpretación, sumamente lograda. El plantel de actores no desmerece y en ningún momento pecan de exagerados, algo que ocurre en muchas cintas de terror de los últimos años. Es que en el tema actoral ese género está perdiendo a marchas forzadas. Actuaciones como las de The ring o Paranormal Activity y sus múltiples secuelas son ejemplos de calidades más bien malas y eso desmerece mucho el resultado final.

Sería una decisión inteligente sacar una entrada para comprobar hasta qué punto el director de la obra se crece, llegando a superarse a si mismo. Con esta película consigue aumentar las ganas y el interés del espectador por la novela negra y los filmes del estilo. El visionado será una experiencia positiva, tanto si se toma como un simple rato de ocio como si se está dispuesto a ir un poco más allá para aprender de las mil técnicas camaleónicas que ofrece el sector.

Estrenos | Más Películas
pinga02 728x90
Síguenos en Facebook y Twitter
© 1997-2024 AGD y LaSemana.es
¿Quiénes somos? | Contratar publicidad