Actores: James McAvoy, Imogen Poots, Jamie Bell, Joanne Froggatt, Eddie Marsan
Género: Comedia
Duración: 97 minutos
País: Reino Unido
Año: XXII
El detective Bruce Robertson, interpretado por James McAvoy, es un detective corrupto, pervertido, narcisista, drogadicto, ludópata y despreciable que trabaja en el cuerpo de policía de Edimburgo. A pesar de todo, quiere un ascenso, y hará todo lo que sea necesario para conseguirlo.
La cinta es una adaptación de la novela Escoria, de Irvine Welsh, autor de la obra que inspiró Trainspotting en 1996. Con estos antecedentes y tras ver el tráiler de Filth, el sucio, lo primero que te viene a la cabeza tiene todo que ver con Santiago Segura. Y con razón: la película tiene todos los ingredientes para horrorizar a los detractores de Torrente y emocionar a sus adeptos.
Está claro que el personaje central, el detective Robertson, no es una personalidad destinada a generar simpatía en el público. Los antihéroes parecen haberse puesto de moda. La trama está entretejida alrededor de las excentricidades y vicios de su protagonista, al más puro estilo Torrente pero con un gusto menos agresivo, más “sofisticado” si esa es una palabra que pueda aplicarse a este tipo de películas.
Llama la complejidad de los personajes secundarios de la cinta, todos fuera de lo común: desde un compañero inseguro que se deja llevar por la degeneración de Robertson, hasta un guionista frustrado, pasando por el único amigo del protagonista, interpretado por Eddie Marshall.
Se trata de un filme que no dejará indiferente: cínico, gamberro, presidido por el humor negro y por un elenco brillante, ha recogido comentarios que se mueven por extremos.
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