El mes de junio de 2002, el guitarrista Paco de Lucía inicia una gira de once días por Europa. Lo que comienza como un seguimiento de sus rutinas como artista evolucionará hasta convertirse en un viaje introspectivo a su pasado, su memoria y las claves que le permitieron revolucionar el flamenco.
Los vaivenes de un día simbólico de su gira, desde que amanece hasta que Paco y sus músicos terminan el concierto, funcionan como el esqueleto vertebrador de la historia de uno de los músicos más importantes del siglo XX. No es solo un seguimiento físico, es un viaje al alma de Paco: a sus recuerdos, a las cosas que le atormentan, que le interesan o le hacen reír abiertamente. Mediante flashbacks y con él como único narrador, desgrana en orden cronológico desde su infancia hasta sus días postreros en Mallorca, donde ultimo los arreglos finales de su disco póstumo.
El director, no es otro que Francisco Curro Sánchez Varela, el hijo del gran guitarrista, que se pone tras las cámaras ayudado por sus hermanas, Casilda y Lucía Sánchez Varela. La productora encargada de impulsar este proyecto es Ziggurat Films, centrada en el desarrollo y la creación de documentales y largometrajes de ficción en su mayoría.
El documental fue presentado en la pasada edición del Festival de San Sebastián y se proyectó en la sección Zabaltegi del certamen. Calificado como vigoroso y brillante, un retrato de la vida musical del uno de los más grandes guitarristas de todos los tiempos. La historia queda estructurada, por un lado, con una entrevista íntima en la que el tocaor ahonda en sus recuerdos más profundos penetrando en sus pensamientos y dejando ver su personalidad y, por otro, su aportación al mundo de la música.
Testimonios de artistas de la talla de Alejadro Sanz, Carlos Santana, Chick Corea o Jorge Pardo, entre otros, completan la visión de este gran icono de la musica.
Un documental musical y biográfico, con una duración de 95 minutos en donde se revelan los aspectos más desconocidos acera de su trayectoria vital y artística, al tiempo que es filmado en los vaivenes de sus giras mundiales. Un homenaje que le brinda su familia desde que nos dejara el pasado 25 de febrero a la edad de 66 años en la ciudad mejicana de Playa del Carmen a causa de un ataque al corazón. Una gran perdida que deja huérfano al mundo del flamenco.
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