Voy a ser mamá es la historia de una adopción. Aleksandra es una mujer con un cargo muy importante en la revista Elle y su marido Cyrille empresario de renombre. Con el paso de los años, a pesar de intentarlo, no han podido tener un hijo. Debido a ello, deciden adoptar un niño ruso, y gracias a sus contactos y abundante dinero, el proceso les lleva menos tiempo de lo normal. El pequeño Alekséi llega de Rusia sin ganas de hablar, con cara de enfado y con la identidad cambiada. A lo largo de la película se van a desarrollar una serie de acontecimientos llenos de sentimientos sin perder en ningún momento el tono cómico del largometraje. Voy a ser mamá es absolutamente recomendable, las carcajadas están aseguradas.
Valérie Lemercier se convierte en directora, guionista y actriz principal de Voy a ser mamá (100% cauchemire en francés del original). Con un papel que interpreta a la perfección, Valérie Lemercier consigue ser una mujer adinerada, caprichosa, odiada y alabada a su vez en el trabajo. Sin otra preocupación que ella misma, Aleksandra debe aprender a cuidar Alekséi, un niño ruso que no deja de tener el ceño fruncido y sólo entiende el ruso. La evolución del personaje de Lemercier es notable en “Voy a ser mamá”, transformando a Aleksandra en algo más que una mujer con tacones y ropa de marca.
Gilles Lellouche interpreta a Cyrille, el marido de Aleksandra. A pesar de que ambos tienen amantes, parece que el amor que les une es fuerte. Siempre mima a Aleksandra y quiere lo mejor para ella. Cyrille es otro de los personajes típicos de la alta sociedad. Atractivo y rico, será el hombre que favorezca la sensatez y la madurez en el matrimonio. Sin duda, Gilles Lellouche es uno de los actores franceses más reconocidos actualmente. Una de sus últimas películas, Thérèse Desqueyroux, en la que interpreta a Eric, Lellouche desarrolla un gran trabajo junto a Audrey Tatou, la actriz conocida por su papel protagonista en la reconocida y original película Amélie