La mezcla de género es algo que las compañías de cine suelen usar para llamar la atención del público. La cuestión, es saber usar esta táctica para llamar la atención y más cuando en España, como es el caso, toda la recaudación en taquilla está siendo para Ocho Apellidos Vascos.
La nueva película de Pierce Brosman titulada Mejor otro día es un drama en toda regla ¿Desde cuándo el suicidio no es algo trágico? Por qué de esta situación límite es de donde parte el filme. En las vísperas de un año nuevo coinciden , en la azotera de un rascacielos londinense, dos personas que tienen un propósito muy claro: acabar con su propia existencia. Pero al entablar conversación verán la luz a su difícil situación y harán un curioso pacto: Seguirán con vida hasta el Día de San Valentín.
La trama, desde luego, no pasa desapercibida por nadie, y el guión de la misma tiene tintes cómicos, sí. Otro dato a tener en cuenta es que la historia está basada en el libro En Picado escrito por Nick Hornby.
Estos tres datos son los únicos positivos de la cinta dirigida por Pascal Chaumeil, bueno si no contamos que Pierce Brosman vuelve al cine, pues esta figura mítica de la pantalla hace, como siempre, un buen trabajo.
El guión es aceptable por los tintes cómicos que posee la película, pero la adaptación es pasable, los actores son los que dan un poco de fuerza a las líneas escritas por Jack Thorne. Una película que no sobresale en ningún medio, pero que tendrá una pasable acogida del público, desde luego, no estamos ante la cinta del año.
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