Txema García.- Vojislav Kostunica, el nuevo presidente de Yugoslavia, juró su cargo el sábado 7 de octubre. Horas antes, el anterior mandatario, Slobodan Milosevic, en un mensaje televisado, tras una reunión con el nuevo presidente, reconoció al propio Kostunica como vencedor en las elecciones presidenciales del pasado 24 de septiembre.

El nuevo presidente ha sido reconocido por la Comunidad Internacional, la Iglesia Ortodoxa yugoslava, el Ejército y el Parlamento. Momentos antes, el Tribunal Constitucional yugoslavo se había retractado de su decisión de anular las elecciones y había dado a Kostunica como vencedor. Aún así, Milosevic, en un alarde de instinto de supervivencia, anunció que él seguirá en la vida política del país balcánico. La llegada de Kostunica a la presidencia tuvo su base en la enorme movilización ciudadana de la semana pasada en contra del régimen También, cabe destacar los continuos esfuerzos de la Comunidad Internacional para reconducir la situación yugoslava sin derramamiento de sangre.
El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Igor Ivanov, viajó hasta Belgrado para entrevistarse, por separado, con Kostunica y con Milosevic. La entrevista con el ex presidente yugoslavo sirvió para hacerle ver que no podía mantenerse en el poder y para poner fin a una ola de rumores que afirmaban que Slobodan Milosevic había abandonado la capital en un avión militar.
El encuentro con Vojislav Kostunica fue clave para que éste fuera designado ganador de las elecciones y, por extensión, presidente del país. La Unión Europea y Estados Unidos, que han estado también muy al tanto de lo ocurrido, se han apresurado a anunciar que las sanciones contra Yugoslavia van a comenzar a levantarse a partir del lunes 9 de octubre.
Aunque esta decisión va desarrollarse de manera paulatina, han surgido voces discrepantes al respecto. Éstas consideran que no se pueden eliminar las sanciones hasta que Milosevic no comparezca ante el Tribunal Penal Internacional. Este ultimo extremo parece, todavía, un poco lejano ya que Kostunica ha anunciado que no va a entregar a Milosevic a la Comunidad Internacional.
El futuro de Slobodan Milosevic es, por el momento, confuso. El ex presidente ha anunciado su intención de mantenerse como presidente de su partido y hacer una férrea oposición. Sin embargo, son muy pocos los yugoslavos que abogan por esta hipótesis, y creen que Milosevic abandonará el país.
[8-10-2000]