Raquel González.- La Familia Real al completo hizo su aparición en el hemiciclo de las Cortes tras recibir los honores de compañías de los Ejércitos de Tierra, Mar y Aire, y atravesar la puerta principal del Congreso de los Diputados, que se abre en muy contadas ocasiones.
El hemiciclo -muy concurrido, ya que allí estaban reunidos diputados y senadores- esperaba que don Juan Carlos diese por inaugurada oficialmente la VII Legislatura de la historia democrática española. Los mensajes que lanzó el monarca fueron de muy diversa índole. El primero de ellos fue dirigido directamente a los parlamentarios, a los cuales felicitó y animó a ejercer su tarea "con eficacia y responsabilidad". También les instó a estar cerca de los ciudadanos y "próximos a sus preocupaciones". Así mismo, animó a la oposición a ejercer control sobre la gestión del Gobierno.
El Rey, acompañado en la presidencia por Doña Sofía y el príncipe Felipe, no obvió el tema del terrorismo, del que dijo no tener cabida en una sociedad democrática. "La unidad en la defensa de los valores democráticos ha de servirnos para que desaparezca de nuestra convivencia la violencia terrorista", afirmó. Del mismo modo, comentó que la contribución de mayorías y minorías son fundamentales para el funcionamiento y eficacia de la democracia".
El Rey, que exigió esfuerzos en el campo de la educación e investigación, mostró su íntima convicción de que España se encuentra "ante una gran oportunidad", que llega tras "un trabajo riguroso y paciente, de todos, durante las últimas décadas". El discurso acabó con todo el hemiciclo puesto en pie y aplaudiendo al Rey. Los únicos que no se unieron a esta ovación fueron los representantes del PNV y EA.
Anterior a la intervención de don Juan Carlos, la presidenta del Congreso, Luisa Fernanda Rudi, también lanzó su discurso. En él resaltó el hecho de que, por primera vez, las dos Cámaras estén presididas por mujeres. Rudi también subrayó la necesidad de reformar los Reglamentos de ambas Cámaras. La presidenta no quiso dejar de lado el tema del terrorismo, al que definió como "anacrónico e irracional".
[3-5-2000]